Una empresa tecnológica española operaba en un sector dominado por otra empresa que ejercía conductas anticompetitivas de acuerdo con la ley española que imposibilitaban el libre desarrollo de la competencia. La conducta había sido considerada anticompetitiva por el juzgado de primera instancia, pero había sido apelada. La empresa tecnológica necesitaba capital para poder seguir desarrollando su negocio y poder crecer, y no podía esperar a una sentencia firme para cobrar ni arriesgarse a no recibir nada por esta reclamación.
Solución
Claimbnb estructuró una inversión que:
monetizaba una cantidad muy significativa
pagaba a los mejores profesionales jurídicos y económicos
Resultado
El demandante contó con los mejores profesionales jurídicos y expertos económicos para contestar la apelación de la demanda, monetizando la reclamación, y solicitando la ejecución provisional de sentencia, al tiempo que conservaba una cantidad significativa en caso de ganarse finalmente.